El blog es un espacio virtual propicio para presumir qué tan ávido se está de conocimiento, y la manera más mediocre de hacer manifiesto tal nivel de "sabiduría" es citando verdaderos académicos. Mirando una cosa aquí y allá me encontré con un fragmentico de algun artículo mordaz, de esos que escribe Eduardo Escobar, poeta nadaísta y columnista de El Tiempo, en donde relata Los oficios del poeta, y del que no tengo el registro en mi memoria de dónde lo encontré, por eso hago esta introducción. El fragmentico va así:
"Como tantos poetas recurrí a mil oficios ramplones y actividades prosaicas: fui auxiliar de contabilidad, patinador de banco, mensajero sin bicicleta, fabriqué bolsas de polietileno, joyeros de cartón y terciopelo, fui almacenista, me desempeñè como anticuario ambulante, vendedor de muñecas de navidad de diarios y semanarios, artesano, armador de faroles, promotor de rifas, ayudante de cocina, escritor de nimiedades para revistas intrascendentes, crítico mercenario de arte, campanero de una pandilla de marihuanos"
Toda una muestra de que el oficio de poeta es tan variado que conlleva a otros, pueden tomarlo como una manera de inspiración y dedicarse enteramente a la poesía, depronto quien quita de ahi salga algo con qué comer.
"Como tantos poetas recurrí a mil oficios ramplones y actividades prosaicas: fui auxiliar de contabilidad, patinador de banco, mensajero sin bicicleta, fabriqué bolsas de polietileno, joyeros de cartón y terciopelo, fui almacenista, me desempeñè como anticuario ambulante, vendedor de muñecas de navidad de diarios y semanarios, artesano, armador de faroles, promotor de rifas, ayudante de cocina, escritor de nimiedades para revistas intrascendentes, crítico mercenario de arte, campanero de una pandilla de marihuanos"
Toda una muestra de que el oficio de poeta es tan variado que conlleva a otros, pueden tomarlo como una manera de inspiración y dedicarse enteramente a la poesía, depronto quien quita de ahi salga algo con qué comer.
